PRÓLOGO DE JUAN A. OLMEDO
Es un privilegio y un auténtico placer realizar este prólogo al primer poemario editado de mi amigo Rafa García Jover, profesor de secundaria y lector incansable, que desde hace mucho ha sentido la necesidad de expresar de forma poética sus inquietudes y reflexiones.
Los poemas de este libro tratan de su concepción de la poesía (el autor rechaza la reflexión hueca y el adoctrinamiento), del paso del tiempo (como ineludible vista atrás) o de él mismo (en relación con su identidad —no solo sexual—). Y lo hace siempre con la realidad como punto de partida o de llegada y con múltiples referencias culturales (Carnero, Baudelaire, Banksy, Miguel Hernández, Fernández Mallo…), que hacen que la intertextualidad sea una de sus señas de identidad. Por ello, resulta esencial atender a las citas y a las notas a pie de página, pues sitúan los poemas en esas realidades, los contextualiza.
En cuanto al tono, Rafa pretende plantear una visión de esa realidad basada en su aceptación («Que no turben las aves el crepúsculo», como indica la cita inicial); aunque a veces el pesimismo le vence sin que ni él mismo pueda evitarlo.
En definitiva, este poemario contiene todo lo que se espera de un buen libro de poesía: originalidad, introspección, reflexión a partir de la actualidad y dominio tanto del lenguaje como de la técnica. Y, como la mejor Literatura, nos invita a la lectura pausada que se convierte en lectura gozosa.
Por todo ello estoy convencido de que tanto la crítica como los/as lectores/as valorarán su trabajo como se merece y que se convertirá en uno de esos poetas que, con voz propia, se abren paso en el difícil panorama cultural.
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PANÓPTICO (Gran Vía, 1 de agosto, 7:30 horas)
La vida es un viaje en paracaídas y no lo que tú quieres creer.
Vicente Huidobro
Se requiere mucho esfuerzo, lo sé,
pero esta losa desnivelada
a plena luz del día
me ha devuelto a la cabeza esta asfixia de buscarte.
Y me he puesto a hacerlo
en los cajones
(me dijeron que estarías allí),
en la página 536 del tomo 3,
en el objeto cuya imitación le da valor,
en las circunstancias que son más causas
que consecuencias.
Y por no haber encontrado nada más que
la lógica que todo lo cubre
y el significante del rezo
(el significado del deseo)
hecho polvo,
me dispongo a subir otro selfie a Instagram.
Porque allí, gemelo univitelino,
donde hubo mundo / pasado
es imposible que no nos queden restos
de la inapetente vida consumida.
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